Antes, el proceso de atracción y contratación se hacía con base en lo que decía un CV. Ahora, los reclutadores se fijan más en las habilidades y por eso sus preguntas en un proceso de selección son otras.

La pregunta “¿Cómo te ves en cinco años?” ya es obsoleta en una entrevista laboral, por ejemplo.

Hoy, los reclutadores recurren a preguntas que los ayuden a determinar si un postulante posee o no las habilidades blandas y técnicas que se requieren para el puesto disponible.

Pero esto no significa que la experiencia, los títulos o las certificaciones del profesionista no cuenten durante el proceso de selección, más bien, indica que la conversación en las entrevistas de trabajo estará guiada por ‘sacar a relucir’ las competencias del candidato.

Y aunque un proceso de selección tiene varias fases y en cada una de ellas puede variar el tipo de preguntas, según la vacante ofertada y las necesidades de la empresa empleadora, los reclutadores sí cuentan con un nuevo combo de preguntas que consideran más importantes y que no deben faltar en un proceso de selección, por ejemplo:

• ¿Cómo planificas tu día?
• Cuéntame una situación que te puso a prueba en tu actual empleo.
• ¿Qué aprendiste de los ‘fracasos’?
• ¿Cómo haces que tu equipo cumpla con los objetivos?
• ¿Por qué debo contratarte a ti y no a otra persona?
• ¿Qué beneficios o compensaciones no son negociables para ti y cuáles sí?

Mostrar interés en los postulantes, saber qué buscan y cuáles son sus principales motivadores, hará que haya menos rotación de talento.

Por otro lado, hacer las preguntas “de siempre” sin cuestionar su utilidad y su impacto en la información que se recibe del candidato, será desaprovechar tiempo valioso para verificar su correspondencia con el cargo y con la organización.

Si te encuentras en búsqueda de talento, podemos ayudarte en info@integrach.com.