Las empresas PYMES en sus primeros años, no suelen ver su verdadero potencial o no concretan una visión hacia ser marcas más grandes, por factores como la cantidad de personal, la cantidad de clientes o la percepción del mercado y la competencia.

Sin embargo, si tú eres parte de una empresa PYME, te recomiendo dejar de verte como una competencia pequeña.

Como especialistas en el desarrollo organizacional hemos visto PYMES crecer en su operación; gestionar pedidos al por mayor y establecer alianzas con marcas reconocidas. ¿Qué puedo hacer si ya estoy en este punto dentro de mi organización?

¿Cómo evitar que el crecimiento rebase mi capacidad operativa?

Primero que nada, siéntete orgulloso de ser líder de una empresa con un claro crecimiento empresarial, es momento de pensar en una estrategia efectiva de crecimiento para evaluar la plantilla operativa en contraste con la necesidad de la operación, fortalecer procesos, flujo efectivo de comunicación intradepartamental, capacitación y desarrollo de talento.

Antes de ejecutar un “plan de acción urgente”, es importante iniciar con un marco estratégico y de desarrollo empresarial, con esto me refiero a definir objetivos a corto, mediano y largo plazo; estos deberán ser a nivel organizacional principalmente, posteriormente cada departamento deberá de tener sus indicadores que contribuyan al objetivo general de la empresa en los plazos establecidos.

Ojo, estos objetivos deberán incluir medidas concretas de proceso internos, capacitación del personal y la implementación de políticas de bienestar laboral (recuerda, tus clientes internos son igual de importantes que los externos).

El siguiente paso es crear un protocolo de comunicación interna que facilite que el personal esté informado de cambios organizacionales, promoción interna de crecimiento, noticias relevantes que impactan el trabajo de un área o que proyecten que la empresa está creciendo. Claro, si tu personal no tiene un equipo de cómputo, no significa que no aplica este punto, más bien, se requiere adecuar ese flujo de información para que se enteren de cada aviso.

No olvides considerar la participación de tus colaboradores en la empresa, ya sea a través de la sindicación o la creación de comités que representen sus intereses.

El comité no es necesariamente formado por líderes formales, pueden ser colaboradores con competencias de liderazgo, estos serán tus agentes de cambio y mediadores.

Invertir en los programas de capacitación y desarrollo del talento interno es invertir para lograr el objetivo de fortalecer las capacidades de los colaboradores y aumentar el compromiso con la empresa.

Con esta guía, tienes un camino trasado para un crecimiento controlado.  Al implementar una estrategia integral que abarque estos aspectos, podrás fortalecer los procesos internos, ofrecer beneficios adicionales a tus colaboradores y mantener el control operativo a medida que la empresa continúa creciendo.

Sabemos que suena complejo, pero apoyarte de expertos te hará el camino más sencillo. Te ayudamos: info@integrach.com